Separamos en distintos recipientes todos los ingredientes que debemos utilizar para cocinar la receta seleccionada, en las cantidades descritas.

Limpiamos las acelgas y separamos los tallos de las hojas. Quitamos las hebras a los tallos y los cortamos en dados. Picamos los ajos. Preparamos el limón, la harina, el aceite, la sal y la pimienta. Reservar todos los ingredientes por separado.

En una olla ponemos agua y llevamos a ebullición. Cuando empiece a hervir echamos los tallos de las acelgas y las cocemos durante 15 minutos. Con una ayuda de una espumero los sacamos de la olla y reservamos. En el mismo agua hervimos las hojas de las acelgas durante 1 minuto. Las escurrimos también y las picamos. Reservamos el agua de cocción. En una sartén ponemos un poco de aceite y dejamos que caliente un par de minutos. Agregamos los ajos y los rehogamos durante 3 minutos. Añadimos la harina y removemos con los ajos. Agregamos medio vaso del agua de las acelgas, y movemos bien hasta que la harina se disuelva. Echamos los tallos de las acelgas, y al cabo de un par de minutos, las hojas. Cocemos un minuto más y removemos, hasta que quede una salsa espesa. Salpimentamos. En otra sartén, ponemos aceite y dejamos que caliente un par de minutitos. Ponemos el rodaballo y freímos durante un par de minutos. Le damos la vuelta, y acabamos la cocción un minuto más. Agregamos un chorrito de limón por encima, y...¡Listo!

Servimos en un plato plano, colocando las acelgas en la base, encima ponemos el rodaballo, y una hojita de perejil encima. Acompañamos con la guarnición que corresponda.

Glúten, Pescado, Sésamo, Sulfitos