Separamos en distintos recipientes todos los ingredientes que debemos utilizar para cocinar la receta seleccionada, en las cantidades descritas.

Encendemos el horno a 180º. Mientras tanto, pelamos y troceamos las espinacas, la cebolla y el ajo. Preparamos el queso y la leche. Reservamos todos los ingredientes por separado

En una sartén, con un poco de Aceite de Oliva Virgen Extra, echamos la cebolla y el ajo, y dejamos que rehoguen unos 5 minutos. Añadimos las espinacas y continuamos con la cocción unos 10 minutos más. Cuando estén ya ponchaditas, añadimos la leche, salpimentamos y dejamos cocinar unos 5 minutos más. En cuanto vuelva a hervir, pagamos el fuego y reservamos. En una bandeja de horno, añadimos mantequilla y lo metemos en el horno para que derrita un poquito. Cuando veamos que queda líquida, sacamos la bandeja del horno y esparcimos por toda la superficie. Entonces agregamos el preparado y esparcimos bien por toda la superficie de la bandeja. Espolvoreamos toda la superficie con el queso, y lo metemos en el horno para gratinar, y...¡listo!.

Servimos en un plato plano caliente.

Glúten, Sésamo, Sulfitos, Leche