Separamos en distintos recipientes todos los ingredientes que debemos utilizar para cocinar la receta seleccionada, en las cantidades descritas.

En una olla ponemos el caldo y dejamos calentar a fuego lento. Retiramos pieles y espinas del Bonito . Desgranamos los guisantes. Pelamos y picamos el ajo, la cebolla y el perejil. Preparamos la leche, los huevos, el pan de molde, el vino, la harina, el laurel y la pimienta. Reservamos todos los ingredientes por separado.

En un bol ponemos leche y agregamos las rebanadas de pan de molde. A continuación cogemos el bonito y lo picamos en trozos pequeños, y lo ponemos en otro bol, en el que agregamos también el ajo picado, el perejil y el huevo batido, y lo mezclamos todo bien. A continuación añadimos el pan de molde remojado, y acabamos la mezclar todos los ingredientes. Salpimentamos, y le damos forma a las albóndigas con cuidado. Las pasamos por harina, y reservamos. En una sartén ponemos aceite y dejamos calentar un par de minutos. Ponemos con cuidado las albóndigas, para marcarlas por todas las zonas de su superficie. Reservamos. Seguidamente, en la misma sartén, echamos la cebolla y el ajo, y rehogamos durante 12 minutos. Cuando las tengamos bien pochaditas, agregamos un poquito de harina y removemos bien, hasta conseguir integrar el roux. Ahora vertemos un poco del vino, y dejamos que reduzca. Agregamos entonces el caldo de pescado y los guisantes, y dejamos que se cocine todo junto durante 20 minutos. Rectificamos de sal y pimienta, y colocamos entonces las albóndigas, que se acabaran de cocinar durante 5 minutos más. Comprobamos que todo esté en su punto, y...¡Listo!

Servimos en un plato plano, colocando las albóndigas en el centro, con la salsa por encima.

Glúten, Apio, Huevos, Pescado, Sésamo, Sulfitos, Leche